El Senado de la Nación rechazó el proyecto de ley “Ficha Limpia” con una votación de 36 a 35. La iniciativa buscaba prohibir la postulación de personas condenadas por delitos vinculados a la administración pública. Si bien la propuesta generó un debate intenso, no alcanzó la mayoría necesaria para ser aprobada. Entre los puntos destacados, los legisladores señalaron la importancia de la ley como una herramienta para fortalecer la transparencia política, pero también se advirtieron riesgos en cuanto a su constitucionalidad.

Los jefes de bloque ofrecieron sus posturas al respecto. Eduardo Vischi, del bloque de la UCR, señaló que la ley responde a un pedido de la sociedad que exige "más decencia y que la función pública sea ejercida por personas probas". A su vez, Alfredo de Angeli, del PRO, reconoció la importancia de la iniciativa, aunque remarcó que aún hay desafíos por superar en la política. "La clase política ha sido descreída, por eso es bienvenida la Ficha Limpia, pero no alcanza", expresó.

Por otro lado, desde el kirchnerismo se rechazó la propuesta, asegurando que la misma tenía como objetivo "proscribir a una persona inocente", en alusión a Cristina Kirchner. "Este proyecto es inconstitucional porque viola el principio de inocencia del artículo 18 de la Constitución", advirtió Anabel Fernández Sagasti, quien consideró que la ley era una amenaza para los derechos fundamentales.

El debate también incluyó intervenciones que destacaron el carácter simbólico de la ley. Juan Carlos Pagotto defendió la iniciativa, explicando que no estaba dirigida a "perseguir a nadie" sino a responder a un reclamo generalizado de la sociedad. Sin embargo, también hubo quienes criticaron que la medida era insuficiente para abordar los problemas estructurales de la corrupción. Como expresó Martín Lousteau, "no es un paso para festejar, no es que acá se terminó la corrupción o la impunidad".

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