El ataúd del Sumo Pontífice fue trasladado en medio de un profundo silencio, mientras integrantes del clero sostenían el Libro de los Evangelios. La misa exequial estuvo a cargo del cardenal Giovanni Battista Re.

Entre los líderes presentes también estuvieron los reyes Felipe VI y Letizia de España, el presidente francés Emmanuel Macron y la primera dama Brigitte Macron, y la primera ministra italiana Giorgia Meloni.

La gente se mostró conmovida no sólo en la Plaza de San Pedro, sino también en las afueras de la Basílica de Santa María la Mayor, donde se realizaron oraciones en homenaje a Francisco.

Tras la ceremonia, el féretro recorrió aproximadamente seis kilómetros por las calles de Roma, pasando frente al Coliseo y los Foros Imperiales, siguiendo en parte el antiguo trazado de la Vía Papalis. El cortejo fue público y estuvo acompañado por un fuerte dispositivo de seguridad.

Las imágenes del funeral, captadas por Reuters, reflejaron la solemnidad y el respeto con los que el mundo entero despidió al "Papa del pueblo".