"El Papa Francisco puso sobre el tapete temas que antes no se tocaban”, afirmó el Padre Maza, destacando la apertura del Papa a cuestiones como la inclusión de los divorciados, los homosexuales y la relación de la Iglesia con los sectores más desfavorecidos de la sociedad. "Él no tuvo miedo de abrir el debate en temas que durante mucho tiempo fueron tabú dentro de la Iglesia", añadió el sacerdote, quien remarcó la importancia de estas decisiones para un mundo que, según él, necesita más apertura y entendimiento.

El Padre Maza también destacó la cercanía del Papa con las periferias, tanto sociales como espirituales. "Él se dedicó a escuchar a los más necesitados, a los que históricamente habían quedado fuera del radar de la Iglesia”, dijo el sacerdote. Según él, el Papa Francisco no solo habló de temas teológicos, sino que llevó el mensaje cristiano a las calles, buscando siempre tiernos puentes entre la Iglesia y las realidades más complejas del mundo contemporáneo.

El sacerdote también se refirió a cómo el Papa renovó las ceremonias y celebraciones dentro de la Iglesia. "Francisco hizo todo más cercano, más simple, más humano”, señaló, refiriéndose a la forma en que el Papa redujo la pompa y los rituales complicados, acercando la liturgia a la gente común. El Padre Maza concluyó diciendo que el legado de Francisco será recordado por su humildad, su apertura y su valentía al llevar a la Iglesia a un lugar más inclusivo y cercano a las personas.

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