Monti remarcó que desde el inicio de su participación en la causa en junio de 2024 sostuvo esa línea y que ningún actor judicial o familiar lo desmintió.

“Nadie me salió a cruzar, ni abogado, ni querella, ni los familiares jamás me salieron a cruzar respecto de la hipótesis que yo mantengo”, aseguró. Para el abogado, sus defendidos están cada vez más alejados de la causa principal.

Sobre los errores iniciales en la investigación, Monti fue contundente al responsabilizar a los fiscales provinciales: “El grave error fue no haber detenido a los nueve integrantes de ese almuerzo, incluida la abuela”. Además, afirmó que se debería haber secuestrado los teléfonos y cerrado los accesos a la localidad desde el primer momento. “Cuando tomó la causa la Justicia Federal, ya era muy tarde para obtener algún resultado positivo”, concluyó.

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